Ocho prácticas fundamentales para la gestión del talento

A medida que el año 2023 arranca en medio de la incertidumbre económica, la agitación política y los efectos de la pandemia que todavía persisten, los responsables de la gestión del talento y el aprendizaje están multiplicando sus esfuerzos para preparar a sus líderes y a sus equipos para superar y progresar en este nuevo año.

Es el momento de creer y actuar de forma diferente en lo que se refiere a la estrategia de talento, aprendizaje y liderazgo. Hemos identificado ocho tendencias fundamentales que tendrán un gran impacto en el desarrollo de capacidades de liderazgo y la gestión del talento y el aprendizaje y, por tanto, deberán ser consideradas por los Directores de Talento y los Directores de Formación en 2023. Además, también hemos identificado las acciones clave mediante las cuales los mejores están logrando transformar sus organizaciones.

Las empresas más avanzadas redoblarán sus esfuerzos en:

1. Invertir en el desarrollo de aquellas competencias, propias de cada negocio, que les puedan dotar de las capacidades necesarias para afrontar la incertidumbre económica, generar crecimiento y garantizar la continuidad del negocio.
2. Acelerar y ajustar las políticas y prácticas que forman el sistema de talento para obtener mejores resultados en unos tiempos en los que “hay menos fichas con las que jugar”
3. Fomentar una cultura de aprendizaje para ayudar a las personas a adaptarse a un entorno de mercado en constante cambio.

El detalle práctico sobre como abordar estos esfuerzos e impactar en la organización se encuentra a continuación

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Invertir en el desarrollo de aquellas competencias, propias de cada negocio, que puedan dotar a la empresa de las capacidades necesarias para afrontar la incertidumbre económica, generar crecimiento y garantizar la continuidad del negocio.

1. Desbloquear la capacidad de los líderes de primera línea para suplir las carencias que dejó el Covid en sus capacidades de liderazgo, y que puedan continuar aportando valor

2. En los niveles intermedios, crear líderes preparados para el cambio, que dirijan el negocio a pesar de las condiciones económicas, gestionen la rentabilidad y se preparen para la siguiente etapa de crecimiento

3. Garantizar la continuidad del negocio en medio de la tormenta económica con una planificación proactiva y sistemática de la sucesión de los CEO y de la Alta Dirección, así como de su incorporación

Acelerar y ajustar las políticas y prácticas que forman el sistema de talento para obtener mejores resultados en unos tiempos en los que “hay menos fichas con las que jugar”.

4. Implantar modelos de liderazgo, y un lenguaje, que estén centrados en los empleados y que establezcan el nivel de rendimiento esperado para afrontar los retos del mercado en 2023

5. Aplicar un enfoque de identificación y desarrollo de profesionales de alto potencial adecuado a la rapidez y agilidad que requiere el mercado

6. Establecer un proceso eficaz de captación de candidatos externos para triunfar en la “guerra por el talento”

Fomentar una cultura de aprendizaje para ayudar a las personas a adaptarse a un entorno de mercado en constante cambio.

7. Reforzar la cultura mediante el diseño de iniciativas que integren los comportamientos, las capacidades y los valores, y sean entendibles para los empleados. Demostrar el verdadero retorno de la inversión en las personas

8. Crear un ecosistema de aprendizaje para que los equipos se adapten rápidamente a las circunstancias cambiantes, democratizando y personalizando el aprendizaje

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